Agencias.
Iberia registró un beneficio neto de 223 millones de euros en el en los primeros nueve meses del año, un 236,3% más que en el mismo periodo de 2006, informó la compañía aérea. El resultado de explotación antes de alquileres y amortizaciones (Ebitdar) se situó en 700 millones de euros (+21,5%), tratándose del más alto logrado en la historia de Iberia.
Los ingresos de la aerolínea presidida por Fernando Conte alcanzaron entre enero y septiembre los 4.125,4 millones de euros, lo que supone un incremento del 2,6% con respecto a los nueve primeros meses de 2006. Y los gastos de explotación se vieron reducidos en un 0,8%, hasta los 3.916,2 millones de euros. El coeficiente de ocupación mejoró 2,2 puntos porcentuales, elevándose al 82% en el conjunto de la red, mientras que el tráfico de pasajeros aumentó un 3,5%.
En el tercer trimestre de 2007, la variación del valor de los derivados tuvo un efecto negativo de 37,9 millones de euros en las reservas, debido principalmente a la depreciación del tipo de cambio del dólar. “También tuvo un efecto negativo de 4,2 millones de euros en los resultados del trimestre, localizado fundamentalmente en un aumento del gasto del dry lease (4,4 millones de euros). En el tercer trimestre de 2006 el impacto en la cuenta de resultados ascendió a 9,7 millones”, dijo.
A 30 de septiembre de 2007, la nueva valoración de los derivados supuso un descenso acumulado en el saldo de las reservas de 20,9 millones de euros con relación al cierre del ejercicio 2006, así como una disminución de 3,3 millones en el resultado antes de impuestos acumulado de los nueve primeros meses. En el mismo periodo de 2006, el impacto negativo en los beneficios de la compañía fue de 24,2 millones.